No es complicado sacarle partido a nuestro móvil viejo, y es que podemos usarlo como monitor del sistema en Windows 10, darle una segunda vida usándolo como router o, incluso a convertirlo en una cámara de seguridad. Hoy vamos a enseñarte a usarlo como Dash Cam, las cámaras de salpicadero que a algunos nos gusta llevar en el coche.

Este tipo de cámaras son cruciales si queremos tener alguna prueba de que alguien nos ha robado o golpeado el coche, aunque abordaremos también la legalidad de las mismas, ya que suelen surgir dudas sobre cómo de legal es llevar una cámara grabando en nuestro coche.

Convierte tu móvil en una Dash cam

Dash Cam

Si queremos usar nuestro móvil como Dash Cam, necesitaremos tan solo dos elementos: un soporte de móvil para el coche y una aplicación que nos permita usarlo como cámara de salpicadero. La app más completa del momento es Droid Dashcam DVR. Esta app permite grabar en segundo plano, iniciar la grabación automáticamente, muestra la velocidad GPS, coordenadas, etc. Todo con una interfaz muy fácil de utilizar.


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Esta app permite ajustar al milímetro cualquier parámetro que podamos imaginar en la grabación: resolución, estabilización, exposición, etc.

Además, es de las pocas apps que permiten grabar hasta en 4K (siempre y cuando tu móvil lo permita y tengas memoria suficiente. Llamativo también que podemos grabar en cualquier otra resolución completamente personalizada, desde 320. Es ajustable también el bitrate, enfoque de la cámara, estabilización e incluso compensación de la exposición de noche.

Droid Dashcam DVR

Droid Dashcam DVR

Qué dice la ley sobre usar una Dash Cam

El marco legal sobre las cámaras de salpicadero deja algunas dudas. El criterio de la AEPD fija la diferencia entre grabar para uso privado o usarla como una cámara de videovigilancia. Es decir, si la grabación no trasciende del uso doméstico y privado, no habría problema en utilizar una cámara de este tipo, que no deja de asemejarse a grabarse con una «GoPro».

El problema viene cuando queremos utilizar estas grabaciones como pruebas para incriminar a otra persona. En caso de que la cámara del coche haya realizado tareas de videovigilancia, estas «deben haberse llevado a cabo respetando la LOPD». En caso de que se pruebe que la cámara cumple estos requisitos, podríamos usar la cámara en un procedimiento judicial.

No es tan fácil probar que la grabación es legítima y no incumple los derechos de imagen del tercero al que estamos grabando

Esto no es tan sencillo, ya que sería necesario probar que la grabación no irrumpe en los derechos de imagen de un tercero, teniendo que justificar la necesidad de haber captado estas imágenes.

En resumidas cuentas, no es ilegal llevar montada una Dash Cam, aunque lo tendremos bastante difícil si queremos usar la grabación en un juicio para probar la infracción o delito de un tercero.

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