Hay toda una generación que conoce a Alvin y las ardillas por la horrible cuatrilogía de películas de imagen real que comenzó en 2007, pero lo cierto es que llevan siendo una pieza clave de la cultura pop americana desde hace ya 65 años, cuando debutaron con la famosa ‘Witch Doctor’, un tema para el que David Seville (el nombre artístico de Ross Bagdasarian Sr) jugó con las diferentes velocidades en su grabadora de cintas, que se acababa de comprar por 200 dólares de la época. Fue un éxito sonado que le hizo repetir el truco para otra canción, ‘The Chipmunk Song’ que, esta vez sí, dio nacimiento al grupo de ardillas antropomórficas más famoso de todos los tiempos.
Alvin y Hobbes
Aquel disco acabó vendiendo 12 millones de copias e hizo saltar a la fama a Alvin y sus ardillas, que pronto protagonizaron su primera serie de dibujos animados, que encima se emitió en el prime time de la CBS allá por 1961. Desde entonces, las ardillas cantarinas han hecho millonario a Bagdasarian y se han convertido en un hito de la cultura pop con series, más discos e infinito merchandising.
Con esto en mente, quizá entendáis un guiño interesantísimo de la película de imagen real que solo los más avispados podrán ver: la casa en la que vive el grupo está en el número 1958. O sea… ¡El año en el que Alvin y las ardillas debutaron musicalmente! ¿Quién nos iba a decir que esta adaptación iba a tener tanto cariño por el material original?
Curiosamente, 24 años después de su creación, el propio grupo de música tuvo un spin-off en 1982, su momento de mayor auge: las Chipettes eran unas ardillas femeninas creadas por la nuera de Bagdasarian, Janice Karman, que sigue poniendo las voces incluso ahora. Eso sí, aunque tienen canciones propias en los discos de Alvin y las ardillas, nunca han grabado uno en solitario. Dado que llevamos cinco años sin un disco nuevo (el último se llamó ‘YOLO’, por cierto), ¿es el momento de dar el testigo a las ardillas? Quién sabe.
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