No albergaba muchas esperanzas en esa expansión a modo de calzador para la versión de PS5 del Final Fantasy VII Remake estrenado el año pasado en exclusiva para PS4. Sony alarga de este modo la exclusividad con Square Enix, por mucho que sea un secreto a voces que acabará saliendo igualmente en Xbox y Windows.
Por medio de la INTERmission de Yuffie se condensa un lote más completo que añade dos capítulos extra con esa intrépida ninja, aparte de otros contenidos, un par de sorpresas finales y las evidentes mejoras que conlleva esta versión para PS5. Pero, ¿es suficiente reclamo si habíamos completado el remake en PS4?
Qué novedades aporta Yuffie al remake de FFVII
Final Fantasy VII Remake Intergrade se puede diferenciar en dos productos:
- El mismo remake de PS4 con mejoras adicionales aprovechando la potencia de PS5 para mostrar unas texturas más definidas, al igual que unos efectos de iluminación mucho más realistas, aparte de reducir los tiempos de carga.
- Y la consabida expansión de Yuffie como aventura independiente, situando la historia poco antes de cierto desastre de la barriada del sector 7 de Midgar.
El que haya completado la historia principal de Cloud y compañía no tendrá motivos de peso para rejugarla desde cero, máxime teniendo en cuenta que se puede importar la partida de PS4 (sí, es obligatorio hacerlo desde el juego en PS4) para conservar nuestro progreso e incluso todos los trofeos desbloqueados, saltando automáticamente desde el menú principal tras realizar este proceso.
Si bien a nivel visual las mejoras se perciben, no supone un salto evolutivo digno de mención respecto a otros juegos que sí han salido con la generación actual en mente, como el reciente Ratchet & Clank: Una Dimensión Aparte. Ya el propio Final Fantasy VII Remake se veía muy bien en PS4, especialmente en lo relativo a ciertas escenas y/o paisajes, pero en PS5 no sacar a brillar todo su potencial.
Es con la INTERmission de Yuffie donde se justifica esta versión, que por desgracia no está disponible en PS4 al ser exclusiva de PS5. Y todo porque actúa a modo de expansión para cubrir detalles nunca vistos en este ansiado remake.
Ya de entrada vuelve a quedar patente su naturaleza, al reinterpretar ciertos hechos del Final Fantasy VII de 1997, porque Yuffie no aparecía en Midgar, sino que la reclutábamos al salir al exterior. Si su remake de PS4 nos sorprendió con ciertas licencias, con Yuffie se explota más si cabe esta faceta y se confirman algunas teorías de los fans de cara a su exigente y sorprendente tramo final.
Por medio de dos capítulos de gran duración (varias horas para cada uno si nos lo tomamos con calma, como ha sido mi caso) revisitaremos dos zonas del remake (la citada barriada más un tramo del edificio de Shinra), con nuevas rutas habilitadas para la ocasión para que no sea tan evidente la sensación de déjà vu.
La protagonista absoluta será Yuffie Kisaragi, a quién acompañará durante un buen tramo de la historia Sonon Kusakabe, un interesante añadido de esta historia en la que habrá otros rostros que debutarán por primera vez en este remake, dejando para el final un par de sorpresas bastante locas que preferimos omitir. Tan solo diremos que el universo de este Final Fantasy VII se sigue expandiendo.
Dejando lo bueno para el final en esta expansión
La estructura de estos dos capítulos con Yuffie y Sonon no difieren mucho de lo visto respecto a los de Cloud y compañía. El primero sigue el patrón de los capítulos más extensos, al habilitar hallazgos a modo de misiones secundarias, como la de los carteles del Paraíso de las Tortugas o una nueva versión de Fuerte Cóndor, uno de los minijuegos que menos me gustaron del clásico de 1997.
Con decir que mi mente había olvidado por completo el original y que esta apuesta por un estilo más actual siguiendo la moda del sector de los móviles con tantos y tantos clones, donde ni se libran vacas sagradas como Gears of War, tampoco me ha convencido, resulta evidente que el tramo inicial se hace un poco pesado si somos completistas y dejamos la misión principal de lado. Aunque lo cierto es que tampoco logra brillar si vamos al grano, al ser un capítulo (a priori) de relleno.
Si se hace llevadero es por el carisma que derrocha Yuffie, a quién vemos en su salsa en su propia aventura, destacando por su simpatía y el contraste que supone verla dirigiendo una misión con tan poca edad en comparación con Sonon, al que no le queda más remedio que obedecer a su superiora, por muy impetuosa o torpe que sea. Ambos forman un tándem que da mucho juego en la historia, tanto en las conversaciones de trayectos a pie como en escenas de mayor impacto emocional.
A esto hay que sumarle las novedades jugables que aporta Yuffie, al poder lanzar su shuriken para romper cajas a distancia y obtener de ese modo objetos. Y de igual modo para los combates, al usar el botón triángulo para lanzarlo y acto seguido pulsar el cuadrado para seguir realizando ataques a distancia, a los que les podemos aplicar poderes elementales con el objetivo de sacar ventaja de las vulnerabilidades del rival. Pero lo mejor son los ataques combinados con Sonon.
Al no poder controlar a Sonon directamente (no, en esta INTERmission tan solo controlamos a Yuffie) hay una técnica especial que podemos activar para sincronizar los ataques con nuestro compañero, dando lugar a ataques mucho más poderosos. Aunque esto no quita que sí le podamos dar órdenes de forma manual, como usar habilidades, hechizos u objetos con su barra BTS activa.
De esta forma se compensa que durante toda la aventura tan solo contemos con dos personajes, viendo a una Yuffie tremendamente capaz por sí sola de hacer frente a todo tipo de peligros gracias a la versatilidad que ofrece su shuriken.
El primer momento exigente llega con ese Gigantópodo que mostró Square Enix el pasado mes de mayo, siendo el jefe que cierra el primer capítulo. Hasta esa escena la historia cumple con lo justo y con una nueva localización en la que se juega mucho con el gadget de Yuffie para activar mecanismos a distancia: si hay algún obstáculo de por medio, se falla el disparo, cómo no, así que hay que buscar el ángulo idóneo. Y sobre esto se ahondará en un minijuego especial con cajas.
Es precisamente en el segundo capítulo donde cambia radicalmente, al volcarse de lleno en los combates. Hay leves partes con mecanismos, pero todo es más lineal y sin salida posible: toca avanzar hasta la enorme sorpresa de su tramo final. Ahí se toma otra licencia que afectará el devenir de la historia en las próximas partes de Final Fantasy VII Remake y que nunca se vio en su rama principal… A nivel personal me ha encantado, aparte de ser todo un desafío…
Final Fantasy VII Remake como juego (en PS5)
En cuanto a la historia principal debo decir que fui de los más reacios en su día cuando Square Enix dejó claro que partiría la historia en varios tomos, centrándose en primer lugar en Midgar. Pero al final tuve que comerme mis palabras porque llegué a disfrutar de manera notable esta reinterpretación (bastante ampliada) de lo vivido en el tramo inicial del mítico Final Fantasy VII. Nada que no haya dicho mi compañero Rubén en su día al analizar este remake cuando debutó en PS4, en cualquier caso: una cosa es opinar desde fuera y otra ver qué ofrece en realidad.
Siendo fan del clásico, por mucho que mi corazón se lo lleven los Suikoden en aquella época, me parecieron acertadas las decisiones en cuanto a diseño se refiere, como a la hora de renovar los combates por turnos para hacerlos más dinámicos (de modo opcional), el desarrollo episódico (para rejugar cada tramo directamente al completar la aventura) o sobre todo los cambios en su historia.
Porque no fue un remake al uso, sino de igual modo un reboot para contar cosas de otra manera, con cambios sutiles a veces, con guiños al original, pero también sin miedo a ofrecer giros interesantes en momentos clave. Y con un final que aplaudo por valentía. Final del que, por cierto, tendremos una pincelada extendida en Intergrade, con un par de cinemáticas que dejan entrever qué pasará después…
¿Suficiente para justificar la compra de esta INTERmission de Yuffie? Eso ya dependerá de cada uno, aunque sí que ofrecerá una serie de retos extra para la historia principal de Cloud tras completar la de Yuffie. El problema es su precio de salida si tenemos en cuenta que el remake de PS4 se puede conseguir sin problemas por 34,90 euros en físico. Si compramos directamente la expansión (19,99 euros) sí que compensa, de lo contrario estaremos pagando el doble.
Si no nos interesa la expansión de Yuffie, el juego principal se puede actualizar sin coste adicional a la versión de PS5 (salvo que tengamos la versión que se dio en PlayStation Plus, que no lo permite), ganando en cuanto a rendimiento se refiere respecto al remake de PS4, lógicamente. Ya por esa reducción en los tiempos de carga (sin llegar a lo anecdóticos que resultan en Demon’s Souls al viajar) merece la pena, aparte del uso que se le da al DualSense, por mucho que ya no impresione tanto como lo hizo con Astro’s Playroom, uno de los que mejor lo aprovechó.
Es una aventura larga (casi 50 horas en mi primera vuelta) que nos deja con la miel en los labios, es cierto (al estructurarse en varias partes es inevitable), pero que ofrece una mejor versión de la Midgar que nos marcó tanto en el año 1997.
Final Fantasy VII Remake Intergrade
La opinión de VidaExtra
En definitiva, si jugaste al remake de PS4 ya sabrás lo que te espera, teniendo que meditar muy bien si te compensa comprar a mayores la expansión de Yuffie, la cuál tarda bastante en despegar. Si, por contra, no lo jugaste en su momento tienes el lote ideal para explotarlo a fondo en PS5. No en vano estamos ante la gran reinterpretación de un RPG que marcó a toda una generación de personas.
FFVII Intergrade
Plataformas | PS5 |
---|---|
Multijugador | No |
Desarrollador | Square Enix |
Compañía | Square Enix |
Lanzamiento | 10 de junio de 2021 |
Lo mejor
- Notable reinterpretación de toda una leyenda
- Visualmente es una delicia. Igual que su BSO
- Ofrece retos a la altura, como jefes secretos…
Lo peor
- Que haya que esperar por las demás partes…
- El DLC de Yuffie tarda mucho en despegar
- Fuerte Cóndor sigue siendo prescindible