Dentro de los juegos presentados por Koch Media con motivo de su sello Prime Matter en el E3 2021 hubo varios con toque Souls, siendo uno de ellos Dolmen. Obra de los brasileños Massive Work Studio, nos lleva por un viaje al espacio para hacer frente a criaturas de pesadilla equipados con espadas y armas de fuego.
Su lanzamiento está previsto para bien entrado 2022, pero ya hemos podido jugar a un adelanto de su alpha para compartir las sensaciones que nos ha transmitido y también para ver sus diferencias respecto a las experiencias de FromSoftware.
Jugando con los elementos con armas futuristas
No se puede decir que sea el pionero en el uso de armas de fuego dentro de un RPG estilo Souls (ahí está Remnant: From the Ashes, por ejemplo), aunque sí que aporta un toque de color al imbuirlas de diversos elementos. Y es que, de entrada, aquí contamos con tres barras claramente diferenciadas: una roja para la vida, otra verde para la resistencia y finalmente una tercera en azul para las armas de fuego o ataques elementales. ¿Lo bueno? Que la azul no influye en la verde.
Plantea, por lo tanto, una táctica diferente respecto a otros exponentes del género, al permitirnos alternar entre distintos ataques para aprovechar esas dos barras de resistencia independientes. Aunque no todo será jauja, porque las armas de fuego hacen muy poco daño en comparación a los ataques cuerpo a cuerpo. No es tan shooter como la citada obra de los creadores de Darksiders III, en definitiva.
Esto no quiere decir, en cualquier caso, que debamos descuidar este aspecto, ni mucho menos. Las armas de fuego son indispensables en Dolmen y un claro ejemplo de ello lo tenemos en esos huevos que eclosionan en uno de los primeros pasillos con alta presencia enemiga que recorreremos. El motivo no es otro que estallan si estamos cerca, con lo que nos hacen daño. Mejor disparar primero.
Hay que recalcar de nuevo que estamos ante una versión alpha, lo que significa que ni el acabado gráfico es next-gen (por ahora) ni funciona como un reloj suizo. Hay cierta torpeza de movimientos, una cámara algo caprichosa si no fijamos al enemigo y cualquier otro aspecto habitual ante un producto en un estado de desarrollo lejos de estar finalizado. No llega a sorprender en ningún momento aunque también hay que valorar el hecho de estar ante el primer trabajo serio de este equipo brasileño fundado en 2016 y cuyo único juego es para móviles…
El cambio de registro es importante y obviamente hay mucho margen de mejora en Dolmen, especialmente por culpa de su parecido con Dark Souls (o más bien Demon’s Souls, que tenemos que ir a un «nexo» -en realidad es una nave- para subir de nivel) e incluso Dead Space por el diseño de la armadura inicial y sus «luces».
Sí, hay más de una armadura, pudiendo fabricar las demás usando los materiales que sueltan los monstruos. Algunas son de aspecto futurista, otras se asemejan a la piel de las criaturas que pueblan Revio Prime… Y ante todo, cada una parte de distintas ventajas a las que hay que sacar provecho, como las piezas de la armadura Caniptei para potenciar las quemaduras sobre los enemigos. Porque si sabemos jugar con los elementos sí que se marca diferencia con las armas.
Dolmen tiene mucho trabajo por delante para brillar
Partir de un Souls de ciencia ficción siempre es atractivo, pero de momento Dolmen no saca partido de una de las mayores cualidades de FromSoftware: universos con diseños que fascinan. Es de lo que menos me ha gustado en este trabajo de Massive Work Studio por mucho que se repliquen los caminos ocultos o los atajos. La ambientación aún está muy verde y ofrece poca maniobrabilidad.
No ayuda que para cambiar el equipo haya que viajar hasta la nave, siendo lo único que podemos modificar en plena batalla los objetos de uso rápido. Y aquí sorprende que no haya facilidades para obtener los de curación. O que cuando los consigamos se agoten y para colmo curen tan poca vida. Porque como Souls es exigente y la IA de algunos enemigos es bastante desesperante (por su dureza), especialmente los que atinan a distancia al leer a la perfección tus movimientos.
Que sí, que no deja de ser una alpha y hay mucho margen de mejora, pero ese ligero entusiasmo inicial se va diluyendo a medida que vamos viendo sus taras. Y eso que la idea de potenciar los elementos por medio de una barra especial tiene su punto, al no delimitarse a las armas de fuego, sino que se puede activar con armas cuerpo a cuerpo y de esa forma alternar entre los dos tipos de resistencia.
Si se ajusta su sistema de crafteo para que resulte más cómodo, al igual que resto de gestiones del equipo, la experiencia ganaría enteros. Pero de entrada no puedo dejar de pensar que está en una fase de desarrollo demasiado prematura y que mucho tiene que cambiar para que me anime a volver a Revion Prime para indagar en los cristales que dan nombre al juego. Si se acaba retrasando a 2023 no me extrañaría ni un ápice. Y siendo un proyecto tan ambicioso le vendría muy bien.
Saldrá en PS5, Xbox Series, PS4, Xbox One y Steam