La quinta luna del Festival Nacional de Folklore de Cosquín tuvo como protagonista a Luciano Pereyra, que en una noche accidentada debido a algunos problemas técnicos se vio obligado a sacar a relucir su oficio ante una multitud a la que no le importó la lluvia.

El propio cantante oriundo de Luján, provincia de Buenos Aires, publicó un video en sus redes sociales que muestra cómo su público le hizo frente a las condiciones climáticas adversas. “¡¡¡Cuando algún día mis nietos me pregunten qué es el amor del público les mostraré este vídeo!!!”, aseguró el cantante y agregó: “Simplemente gracias, Cosquín”.

Aunque el concierto de Luciano Pereyra comenzó sin lluvias, el cantante tuvo que improvisar y no seguir el orden establecido por la lista de temas debido a una serie de desperfectos técnicos que demoraron el comienzo del espectáculo. “Suelen pasar estas cosas cuando estamos en vivo y cuando la tormenta da vuelta también”, anunció el presentador de Cosquín al micrófono. “Muchas veces estamos listos para empezar y suceden pequeñas cosas”, agregó y aseguró: “Hay casi diría yo un batallón de técnicos trabajando detrás del escenario para solucionar todos los problemas”.

El conductor del evento pidió un aplauso para “todos los que están trabajando a destajo para que esta noche el espectáculo continúe” y luego de unos tres minutos de incertidumbre, por fin pudo pasarle la posta a Pereyra. Consultado más tarde al respecto en la conferencia de prensa posterior al show, el cantante subrayó: “La verdad es que no sé lo qué sucedió. Son cosas que pasan”. Aparentemente, los problemas habrían sido ocasionados por el equipamiento del propio Pereyra. “Tuvimos que cambiar la lista de temas y el público se enganchó aún más”, destacó el artista.

El músico logró sortear todos los obstáculos y brindó un show de una hora plagado de grandes éxitos, como “El vestido rojo”, “Te estás enamorando de mí” y la balada “Es mi culpa”, que fue cantada a los gritos por el público. Al final, como si hiciera falta algo más, se largó el diluvio y continuó durante el resto de la noche.