Gerardo Rozín murió a los 51 años luego de dar batalla contra un tumor maligno, pero a pesar de haber partido físicamente, dejó una huella imborrable en muchos corazones. El carismático conductor de tevé y periodista supo generar una confianza tal con los artistas y famosos a punto tal que lo consideraban como parte de su familia.
Así es el caso del clan más conocido por todos alrededor del mundo: los Montaner. Desde el patriarca, el propio Ricardo Montaner, hasta sus hijos, Mau, Ricky y Evaluna. Junto a ellos, Rozín compartió momentos únicos, inolvidables y muy íntimos: viajes, almuerzos, cenas, visitar sus hogares, incluso fue testigo de la primera cita que el varón más joven de la familia tuvo con quien ahora es su esposa, Stefi Roitman.
“He sido amigo de un hombre increíble los últimos 17 años. El mejor entrevistador que tuve algún día y uno de los dedos de la mano que cuenta a los pocos amigos de verdad que tengo”, escribió en un extenso posteo el cantante argentino devenido venezolano. Y continuó: “Al final tuvo razón, se iba a ir pronto, tengo dolor y enojo, pero tengo también un profundo agradecimiento por todas las charlas que me dedico y por todas las cuentas de los restaurantes que se apresuró a pagar, también agradezco su talento y el habernos elegido a todos los Montaner como sus parientes cercanos, su familia, el sitio a donde llegar sin aviso y con confianza“.
El ganador del premio Latin Grammy, Nahuel Pennisi, también fue otro de los artistas más cercanos a Gerardo Rozín, pues fue como su “padrino musical” ya que le abrió las puertas de ‘La Peña del Morfi’ (Telefe), espacio en el que el muchacho pudo desplegar ante la cámara todo su talento con la guitarra y su voz, lo que le provocó un gran salto en su carrera profesional.
Además, en una de sus apariciones, Pennisi le dio la primicia de que iba a ser papá de su primer hijo, Mateo, junto a su compañera y gran amor, Mayra Deleo. Y otras tantas vivencia de índole personal se fueron sumando en una relación que el entrevistador y el entrevistado supieron formar, delante y fuera del estudio de televisión.
Así será el “último adiós” a Rozín
Un inmenso dolor se vive en las últimas horas luego de que se confirmara el fallecimiento de Gerardo Rozín, uno de los periodistas y productores televisivos más queridos dentro y fuera del mundo de los medios de comunicación. Este viernes por la noche, su cuerpo dijo “basta”, y tras varios meses de lucha contra un tumor maligno, murió a los 51 años.
Si bien el carismático presentador de tevé, por cuestiones laborales, se radicó en la Ciudad de Buenos Aires para poder estar a la inmediatez del contenido mediático y llegar a la brevedad a los estudios de grabación, Rozín nunca se desarraigó de la provincia de Santa Fe, su amada tierra natal.
Es por esto que su “último adiós” será este sábado en la casa velatoria de Caramuto, situada en el barrio porteño de Almagro, sobre la avenida Independencia. El horario será de 11 a 15 horas. Posteriormente, será trasladado a Rosario, donde se hará el entierro este domingo.
Continúa sin estar definido de forma oficial si, ambos eventos, estarán o no abiertos a la comunidad que quiere acercarse a despedirlo con respeto y cariño.
