Desde que allá por el año 1996 Pokémon llegase a la mítica Game Boy, solo nos hemos preguntado una cosa: ¿Qué pasaría si combinásemos a un Pikachu con un Charizard? O cualquier pareja que imaginemos. La cuestión siempre ha estado encima de la mesa y el deseo de poder ver cumplido este sueño ha sido una constante.

Para paliar la falta de transformaciones conjuntas, durante mucho tiempo hemos usado sustitutos como Pokémon Fusion. Auténticas aberraciones han salido de esa web, pero un programador se ha puesto manos a la obra para complacernos a todos. A través de un sistema procedural que ha diseñado, ha logrado que cualquier criatura de su videojuego pueda combinarse con otra de forma exitosa.

El trabajo de RujiK es fabuloso y más cuando es explicado por él mismo. Confeso seguidor de la saga de Nintendo, relata que en su infancia se compró Dragon Warrior: Monsters. La obra para Game Boy Color era un RPG que permitía fusionar realmente diferentes seres para dar lugar a uno nuevo.

La ilusión del pequeño RujiK era total, pero se desvaneció rápidamente al darse cuenta de la limitada capacidad del sistema para emparejar criaturas. Frustrado durante años, ahora ha logrado su propósito de diseñar un programa que sí permita hacer combinaciones imposibles.

Dispone de unas cuantas decenas de monstruos creados por él mismo para realizar pruebas y los resultados son estupendos. Eso sí, por ahora no ha anunciado ningún plan de lanzar de alguna forma lo que ha creado o generar un juego propio con ello.