El gran cantautor uruguayo se presentará en el Luna Park el próximo 10 de junio.
A ocho años de su última visita a nuestro país y luego de algunas postergaciones obligadas por la pandemia de coronavirus, Jaime Roos se presentará el 10 de junio en el estadio Luna Park.
El artista uruguayo, creador de clásicos como Durazno y Convención, Si me voy antes que voy, Colombina y Los Olímpicos, entre tantos, estará repasando sus grandes éxitos junto a una banda en la que destacan reconocidos músicos como los hermanos Ibarburu, Gustavo Montemurro y el Zurdo Bessio.
La postergada actuación en Buenos Aires había sido anticipada en enero por el propio Ross en una entrevista al diario El País de Uruguay, en ocasión del cierre de su ciclo de shows Mediosiglo, aunque no había precisado fechas.
“Si bien el plan original era que al terminar la gira Mediosiglo me alejaría nuevamente de los escenarios para dedicarme a otros proyectos, hubo que hacer un cambio sobre la marcha. Es muy sencillo: tenemos ganas de tocar y la gente nos dice que tiene ganas de escucharnos, así que vamos a seguir”, había manifestado.
Y añadió: “Como no tengo nada confirmado y estoy curado de espanto de anunciar cosas que no suceden, lo único que puedo comunicarte es una expresión de deseo de tres puntos: hacer una gira por el Uruguay, ir a tocar a Argentina y hacer una despedida en algún teatro de Montevideo”.
Mediosiglo había significado su vuelta a los shows en vivo luego de seis años fuera de los escenarios, en un regreso que se dilató, primero por la pandemia de coronavirus y luego por algunas alteraciones en su agenda.
Su último recital en nuestro país lo había ofrecido en 2015 en Banfield.
Los tickets para el concierto en el Luna Park están disponibles a través del sitio Ticketportal.
Roos de libro…
Y nada mejor para conocerlo que leer El Montevideano, el libro que la periodista e historiadora Milita Alfaro acaba de lanzar en complicidad con el autor de Amándote, Colombina y otras canciones que los argentinos abrazamos como propias.
“Tengo 63 años y viví la tercera parte de la historia de mi país. Sociológicamente, culturalmente, históricamente, para Milita Alfaro mi caso, nacido en ese barrio y en esa circunstancia, es tapa de libro”, dice el hombre que creció en el Barrio Sur, hijo de un crisol de razas familiar. “Soy hijo de todo eso que leíste y se ve reflejado notoriamente en mi obra”, dice pensando en el libro.
“Todos tenemos problemas psicológicos con nuestros padres. Son inevitables. En mi generación, los problemas no sólo fueron los psicológicos que uno puede tener con respecto a los mayores, sino que estábamos en medio de un quiebre político, cultural y sociológico mundial.
Eso produjo una guerra en el interior de la familia; feroz porque era cotidiana. Una guerra en la mesa de los domingos, de los viernes y de los lunes también”, explica.
Me siento representado por la cruz. Allí están mis principios éticos y allí está el símbolo de la civilización a la cual pertenezco. Soy cristiano sin creer que Cristo fue Dios. Cada vez estoy más cerca de la fe y de un Dios único sin interpretación humana”.