Integró el grupo que pergeñó el Operativo Cóndor, que incluyó el secuestro y el desvío de un avión que aterrizó en el archipiélago austral.
La escritora y periodista María Cristina Verrier, única integrante femenina del grupo de militantes peronistas que en 1966 secuestró un avión de pasajeros que iba a Río Gallegos para desviarlo hacia las Islas Malvinas, murió este viernes en Ciudad de Buenos Aires.
«Con gran pesar despedimos a la dramaturga y periodista María Cristina Verrier, quien falleció ayer en la ciudad de Buenos Aires. Desde Argentores enviamos nuestras condolencias a familiares y amigos de nuestra socia en este triste momento», informó un comunicado de Argentores (Sociedad Argentina de Autores de Argentina).
Verrier nació en 1939 en la Ciudad de Buenos Aires y, además de su profusa labor como dramaturga, también trabajó como periodista en la Revista Panorama y es recordada como una de los mentes que ideó el denominado «Operativo Cóndor», que tuvo lugar el 28 de septiembre de 1966.
Por ese entonces Verrier -hija de César Verrier, que había sido juez y funcionario durante la presidencia de Arturo Frondizi- tenía 27 años.
Junto con su pareja, Dardo Cabo, y otros 16 integrantes del Movimiento Nueva Argentina (MNA) se apoderaron de un avión de Aerolíneas Argentinas que viajaba de Buenos Aires a Río Gallegos y forzaron a su comandante a desviar el rumbo hacia las Islas Malvinas. Una vez allí izaron siete banderas argentinas y reclamaron por la soberanía nacional sobre las islas.
Superados en número y armamento, negociaron dejar las armas en el avión y se entregaron ante el párroco de la Iglesia de las Islas –no ante autoridades británicas, ante quienes nunca se rindieron-, y horas después regresaron al continente en un buque argentino. Verrier era la única mujer que integraba el grupo.
El histórico episodio es el tema de una serie de ficción que llegará el próximo jueves a la TV Pública y a la plataforma Contar, titulada «Cóndor Uno Cero Cinco».
En su faceta como escritora, Verrier se destacó por varios textos que fueron llevados al teatro y la convirtieron en una dramaturga de cierto renombre.
Entre la producción teatral de Verrier se cuentan obras como «Los olvidados», «La bronca», «Naranjas amargas para mamá», «La balada de la idiota», «Acá están, estos son», «Cero», «La pequeña gente», «La cueva de los tres jorobados», «Los viajeros del tren a la Luna» y «La roña».
Verrier fue, además, fundadora junto a Abel Sáenz Buhr del teatro El Altillo, ubicado en Florida 460, donde estrenó muchas de sus piezas.
Con información de Télam
DB