Paso 1: Elaboración de la Masa

Ingredientes:

2 tazas de harina de trigo

3 huevos

½ cucharadita de sal

Instrucciones:

En un tazón grande, coloca la harina y forma un hueco en el centro. Rompe los huevos en el hueco y agrega la sal. Con un tenedor, bate los huevos mientras incorporas gradualmente la harina. Una vez que la masa comience a unirse, amásala en una superficie enharinada hasta que esté suave y elástica. Cubre la masa con un paño y déjala reposar durante 30 minutos.

Paso 2: Elaboración del Relleno

La versatilidad de los ravioles se refleja en la amplia variedad de rellenos que puedes usar. Un relleno clásico es el de espinacas y ricota.

Ingredientes:

1 taza de espinacas cocidas y escurridas

1 taza de queso ricota

¼ de taza de queso parmesano rallado

1 huevo

Sal y pimienta al gusto

Instrucciones:

En un tazón, mezcla las espinacas cocidas, la ricota, el queso parmesano y el huevo. Condimenta la mezcla con sal y pimienta, ajustando los sabores según tu preferencia.

Paso 3: Armado de los Ravioles

Divide la masa en pequeñas porciones y estira cada una con un rodillo hasta que esté fina, pero aún manejable.

Coloca pequeñas cantidades de relleno en el centro de cada porción de masa, dejando suficiente espacio entre cada montículo.

Doble la masa sobre el relleno y presiona suavemente alrededor de cada montículo para sellar los ravioles.

Utiliza un cortador de ravioles o un cuchillo para cortar los ravioles individualmente.

Hierve agua con sal en una olla grande y cocina los ravioles hasta que floten en la superficie. Esto suele tomar alrededor de 2-3 minutos.

Paso 4: Servir y Disfrutar

Una vez que los ravioles estén cocidos, escúrrelos y sírvelos con tu salsa favorita. Puedes optar por una clásica salsa de tomate, mantequilla derretida con salvia o crema con nuez moscada. No olvides espolvorear queso parmesano rallado sobre los ravioles antes de servir.

En resumen, los ravioles caseros son una expresión de amor por la cocina y una experiencia culinaria que vale la pena. Desde la preparación de la masa hasta el relleno y el armado, cada paso te conecta con la tradición y la creatividad gastronómica. Así que, ponte el delantal, reúne los ingredientes y adéntrate en el mundo gratificante de los ravioles caseros.