El arte es poroso, por eso disciplinas como la plástica y la música pueden fecundarse mutuamente y provocar combinaciones inesperadas.

Existen, por supuesto, antecedentes: los cuadros que pintaba David Bowie cuando no estaba grabando discos o atrapado en la dinámica de los conciertos; Charly García convirtiendo su arte plástico en la tapa del disco Tango 4 o Luis Alberto Spinetta ideando la rara criatura surrealista del más famoso disco de Almendra.

Y pueden mencionarse otros casos de rockeros que despuntan el vicio del pincel o el lápiz, como el stone Ronnie Wood, los libros con ilustraciones hechas por John Lennon antes, durante y después del apogeo de la Beatlemanía o, para quedarnos por acá, el cantante de Él Mató a un Policía Motorizado que ha ilustrado las tapas de los últimos libros del poeta y ensayista Fabián Casas.

Por no citar los dibujos del mítico músico Daniel Johnston, que se masificaron cuando Kurt Cobain estampó uno de ellos en una camiseta y la imagen recorrió el planeta Tierra.

Ahora se suma a ese universo de vasos comunicantes el arte de M.Jacobs, quien a partir del 21 de septiembre, en las galerías Zero 618 y Boulevard 514 (av. Caseros 528, San Telmo), exhibirá su hacer en la muestra The ArtM.Jacobs Experience: 65 cuadros que abordan y recrean canciones de referentes musicales nacionales e internacionales como Soda Stereo, Los Abuelos de la Nada, Las Pelotas, The Police, INXS, Tan Biónica, The Killers o Duran Duran, entre muchos otros. Sobre las claves de esta exposición M.Jacobs mantuvo una charla vía Zoom con Clarín Cultura.

“Quédate", obra inspirada en la canción Music Sessions #52 de Quevedo y Bizarrap. “Quédate», obra inspirada en la canción Music Sessions #52 de Quevedo y Bizarrap.

–¿Cuál ha sido tu derrotero dentro de las artes plásticas?

–Soy empresario, me he dedicado toda mi vida a la rama de los negocios inmobiliarios, y tengo evidentemente también la genética de mi madre, porque ella logró que a los cincuenta años se despertara en mí este amor por las artes plásticas.

Mi madre era una gran artista –la pintora Mabel Dubra– y me ha dejado este legado en la sangre. Un poquito antes del arranque de la pandemia de Covid-19, con eso de tener demasiado tiempo libre, empecé a pintar: compré unos pinceles, unas paletas, pinturas, y me puse a trabajar.

Empecé a hacer cosas que tenían que ver con Buenos Aires, con elementos relacionados con lo social, pero no lograba hallar un hilo conductor más allá de mi origen. Un amigo me dijo “Mauro, animate, mostrá tus trabajos” y así arranqué.

“Atrasaré las horas”, obra inspirada en la canción "La Melodía de Dios", de Tan Biónica. “Atrasaré las horas”, obra inspirada en la canción «La Melodía de Dios», de Tan Biónica.

–¿Y de qué manera comenzaron a circular esas primeras obras?

–Musicalizaba cada una de mis pinturas, para poder subirlas a las redes sociales. Hacía una pintura que tenía que ver con el Congreso o una calle tradicional de Buenos Aires, y buscaba un tango o algo muy cercano al folklore. Y un día me desperté y advertí que había una veta para poder desarrollar, algo inédito, porque no se había hecho, que era pintar en base a canciones, a hits.

En vez de musicalizar una obra, voy a hacer obras inspiradas en canciones, me dije. Inicié así esta colección en la que sigo por ahora parado, tomando canciones diversas, básicamente aquellas que me gustan y también otras que sentí que podían llegar a funcionar, y que son más que nada hits.

Y al hacer circular los cuadros entre gente conocida, empezó a despertarse en ellos la curiosidad de saber cuáles eran los temas sobre los que se basaban mis trabajos. Le coloqué un código QR a cada cuadro y ahí la gente, con el celular, podía hacer una lectura, y se creaba una suerte de magnetismo en el que el espectador podía encontrarse, a partir del tema musical, con la pintura.

“Tan susceptible", obra inspirada en la canción "En la ciudad de la furia", de Soda Stereo.“Tan susceptible», obra inspirada en la canción «En la ciudad de la furia», de Soda Stereo.

–¿No hubo un contacto con el arte en tu adolescencia o juventud?

–No desde lo técnico, pero la tenía a mi madre, que era profesora de dibujo. Desde ya, a mí siempre me gustó dibujar, y Plástica fue siempre una de mis materias preferidas. Más allá de mi afinidad con los números, la pintura era una debilidad para mí. Y obviamente el dibujo, y a partir de eso, nace el pasaje hacia el color.

Las canciones que eligió

La muestra –que podrá visitarse también el 23 de septiembre en el marco de la celebración de La Noche de los Museos– propone el estímulo de dos vías sensoriales combinadas –la visual y la auditiva– que le permiten al observador-oyente adentrarse en cuadros que remiten a canciones clásicas como Costumbres argentinas, En la ciudad de la furia, El mareo, Message in a bottle, Human o La melodía de Dios, entre muchas otras.

De la inauguración del evento participará el cantautor –y también artista visual– Peteco Carabajal. Es necesario que los concurrentes, además de un celular apto para leer los códigos QR que acompañan a cada pintura, lleven sus auriculares. En diciembre, M.Jacobs llevará sus pinturas al eminente Art Basel, en Miami Beach.

“En camino", obra inspirada en la canción "Costumbres argentinas", de Los Abuelos de la Nada.“En camino», obra inspirada en la canción «Costumbres argentinas», de Los Abuelos de la Nada.

–Para orientar a un neófito en las artes plásticas, ¿con qué corriente se puede asociar tu obra?

–Muchas veces me preguntan cuál es mi patrón de trabajo, o quién inspira mis cuadros para alcanzar un estilo, y lo que puedo decir es que mi arte es una fusión entre lo figurativo y lo abstracto.

Encuentro en ese cruce una comodidad que me permite expresarme, contar una historia con recursos de la figuración más elementos de la abstracción, que es lo que mejor me sienta.

Pero, más allá de la influencia de grandes artistas contemporáneos, lo musical es un ancla muy decisiva para mí. Yo encuentro en gente como Fito Páez, Gustavo Cerati, o incluso en Carlos Gardel, un estímulo.

Incursiono en distintos géneros e incluso me interno en el conocimiento de cada una de las composiciones, trato de entender qué quisieron transmitir, y hago por supuesto un estudio previo, que supone también escucharla muchas veces incluso en el momento de estar pintando. Esa es mi inspiración.

"El 80 por ciento de las canciones hablan de amor", asegura.«El 80 por ciento de las canciones hablan de amor», asegura.

–¿Cuál es el criterio que rige la elección de una canción con posibilidades de convertirse en un “cover” en formato cuadro?

–No es fácil encontrar la canción adecuada, porque el 80 por ciento de las canciones hablan de amor. Te fuiste, me fui, se fue. Encontrar canciones que aborden otra temática no es tan sencillo. Si no, tendría que estar pintando todas las obras con corazones rotos.

Trato de pararme en un lugar donde haya algo más, un mensaje a transmitir, y ese ese es el valor que a mi interesa pintar. Y no es sólo lo local: también estoy elaborando cuadros con canciones en inglés: The Beatles, Elvis Presley, UB40, U2, Pink Floyd, Queen. Ya tengo en mi taller 70 obras, que configuran un salpicado de diversos artistas. Elijo distintas propuestas para que haya variedad en mi obra.

“Mensaje", obra inspirada en la canción "Message in a bottle", de The Police.“Mensaje», obra inspirada en la canción «Message in a bottle», de The Police.

–Si tuvieras que ubicar tus pinturas dentro de un determinado linaje pictórico, ¿a quién mencionarías?

–Hay varias influencias, pero el que se destaca por sobre el resto es Vincent Van Gogh: me llama mucho la atención cómo por aquellos tiempos, en los que no existía este aluvión de imágenes a las que estamos expuestos en la actualidad, esos artistas pudieran detectar en lo real aquello que querían llevar al lienzo.

De hecho, tengo un cuadro en el que me he tomado el atrevimiento de capturar el cielo alucinante de una de las pinturas más conocidas de Van Gogh, que se titula Terraza de café por la noche y la he llevado a una suerte de réplica u homenaje del cuadro, que he titulado Crazy, en el que incorporo, sentados en una mesa, a diferentes músicos a los que considero “distintos”, como Charly García, Luca Prodan o Slash.

Y a nivel local, aunque nuestras técnicas y temáticas son diferentes, me siento próximo a las estéticas de Ricky Crespo y Claudio Roncoli, dos artistas notables que traen, de alguna manera, lo viejo a lo moderno, y tienen una creatividad pop admirable.

“En otras palabras", obra inspirada en la canción "Fly me to the moon", de Frank Sinatra.“En otras palabras», obra inspirada en la canción «Fly me to the moon», de Frank Sinatra.

Ficha

The ArtM.Jacobs Experience

Dónde: Galerías Zero 618, avenida Caseros 528.

Cuándo: martes a sábados, de 15.30 a 19. Desde el 21 de septiembre al 12 de octubre.

Entrada: gratis.

M.Jacobs Básico

  • Buenos Aires, 1968. M.Jacobs es el nombre artístico de Mauro Ricardo Jacobo.
  • Es egresado de la carrera de Administración de empresas en la Universidad de Belgrano y desarrolló su perfil creativo y lúdico en el Estudio Inés Moreno.
  • Ha participado en muestras colectivas y The ArtM.Jacobs Experience es su primera exposición individual.