Todo comenzó caminando. La escritora de novela histórica y realismo romántico Viviana Rivero emprendió junto con su hija una recorrida por uno de los caminos que condicen a una capital europea con siglos de historia: Santiago de Compostela. En la travesía por el campo o entre esas calles de piedra que se levantan en edificios de piedra, la celebrada autora tuvo una certeza: escribiría una novela que entretejiera, como las raíces de los árboles, la historia de una mujer que lucha contra el Imperio Romano, con la de otra mujer parisina en 2055. Ese fue el origen de Los soles de Santiago (Planeta).

El libro sirve además como guía para quien quiera hacer el Camino de Santiago. En su segundo capítulo, dice: “París, año 2055. Eme se bajó del metro y, al recibir una ráfaga de viento frío, se colocó la capucha del abrigo sobre su cabello rojo. Luego comenzó a caminar por la vereda de la calle grande con las manos metidas en los bolsillos de su piloto. Desde su ubicación podía apreciar la torre Eiffel en casi todo su esplendor. A pesar del mal clima, se dejó tentar y, por unos instantes, se quedó mirando la alta y magnífica imagen metálica mientras respiraba el aire con cierto placer; le gustaba lo que veía, pero también la llenaba de esa melancolía que era su eterna compañera”.

Sobre estas vidas enlazadas y sobre los casi medio millón de personas que desandan el camino que lleva a la tumba del apóstol Santiago habló la autora con Clarín Cultura.

La escritora argentina Viviana Rivero en ciudad de Buenos Aires. Foto Maxi Failla.La escritora argentina Viviana Rivero en ciudad de Buenos Aires. Foto Maxi Failla.

–¿Cómo se te ocurrió este tema?

–Yo siempre digo que los escritores son observadores de la realidad. Miramos constantemente, a nuestro vecino, a nuestro barrio, al mundo y viendo precisamente el mundo pensaba, dentro de poco vamos a aceptar que nos pongan un chip. Yo no he usado nunca inteligencia artificial para escribir, ni siquiera un mail, pero mi hijo me dice ‘pruébalo’. Y le respondo: ‘Dejé la abogacía porque me gustaba escribir, si dejo de hacerlo, no voy a hacer más lo que me gusta que es escribir’. El personaje central de la novela, Eme, hace todo con IA y no necesita ni tipear porque tiene el chip incorporado, entonces Perla (una metáfora de Siri o cualquier otra) sabe hasta cuáles son sus pensamientos. Estamos viviendo en un mundo en donde solo las clases altas tienen acceso a algunas cosas y hay una mayoría empobrecida que no tiene recursos o que no los puede usar y una minoría que controla todo. Venía pensando todo esto y mi familia comenzó a decirme por qué no escribes sobre estos temas y así nació el libro. Más allá de ser una novela, con su argumento y todo lo que tiene que tener una novela, es un libro que sirve para replantearnos qué es lo que se viene y si vamos a apoyar eso o no y también sirve como guía para quien quiera hacer el Camino de Santiago: son sus dos finalidades.

–Hay una construcción también de un sistema político imaginado para el año 2055 en tu novela.

–El año pasado hicimos con mi hija el Camino de Santiago que nos llevó a Compostela y fue una experiencia fuerte: estábamos durante 12 horas caminando bajo el sol, al aire libre, conectadas con la naturaleza y pensé no quedás igual después de pasar por esa experiencia. Te pasa primero a nivel personal, es como que se acomodan distinto las cosas en tu cabeza porque no piensas más en lo urgente, sino en lo importante porque ahí no hay nada urgente, es solo caminar sobre la tierra. Me sentí un todo con la naturaleza, con la tierra, las plantas, los pájaros. En las grandes ciudades es todo de cemento, vivimos en edificios de 20 pisos, despegados del sueño, de la tierra, nos enfermamos tanto de tantas cosas porque nos hemos alejado muchísimo de la verdadera vida, entonces el camino a mí me sirvió para eso. Y allí se me ocurrió la idea de la novela, de entrelazar la historia de la lucha de los Astures contra el Imperio Romano y la vida en 2055. Había escuchado sobre la gran mina de oro más grande que existió en el mundo en donde vivían los Astures quienes convivían con la mina, no la explotaban. Pero cuando llegaron los Romanos comienzan a explotarlas y la riqueza deja de ser comunitaria. Hasta ese momento, había personas que sacaban el barro y hacían las vasijas, otros se encargaban de tener animales, cualquiera podía ir a sacar el oro del río. Y con respecto a 2055, actualmente están construyendo muchas ciudades que les llaman las ciudades de los 15 minutos en las que no se necesita salir de ahí para nada: tenés banco, escuela, hospital. En una búsqueda de seguridad o de lo que sea puede pasar en algunos años que no te dejen trasladar porque el auto ensucia el medio ambiente. A los gobiernos le vendría bárbaro porque si tenés una persona en el mismo lugar, es más fácil controlar todo, desde los crímenes hasta el pago de impuestos.

La escritora argentina Viviana Rivero en ciudad de Buenos Aires. Foto Maxi Failla.La escritora argentina Viviana Rivero en ciudad de Buenos Aires. Foto Maxi Failla.

–Pero en el futuro también aparece el amor y la amistad, universales y transversales en el tiempo.

–Sí, eso no lo vamos a perder, pero creo que en el 2055 así el que no sea tecnológico va ser pensado como no preparado. Lo vemos ahora con una persona anciana que a lo mejor le cuesta manejar lo que sea tecnológico, pero no retomamos la sabiduría que también tiene para brindar.

–También hablas de la soledad.

–Sí, aun en la hiperconexión, M se siente más que nunca y acude siempre a Perla que es inteligencia artificial. En un momento, ella estaba caminando por las calles de Paris y está lleno de gente, pero ella se siente sola.

–¿Cómo se pensaste la idea del Movimiento?

–Creo que debe haber existido siempre gente tratando de bregar para que no nos separemos de lo que es importante. En el camino de Santiago, mi hija me decía, espera que voy a abrazar a un árbol. Primero me parecía ridículo pero después yo investigué el ADN de las personas y, cuando estás estresada, una gotita de tu sangre bajo la lente del microscopio exhibe una figura muy fea, sin forma de nada. Sin embargo, cuando estamos en un buen momento, esa figura es armónica, hace trazos bonitos como los árboles que tienen formas armónicas.

Viviana Rivero básico

  • Nació en Córdoba, donde residió junto con su familia hasta que se mudó a España. Se recibió de abogada en la Universidad Nacional de Córdoba y se desempeñó como asesora legal de empresas y abogada litigante.
  • Fue fundadora de grupos para el crecimiento y el desarrollo de la mujer. Ha sido productora y conductora de programas televisivos.
  • Publicó varias novelas, entre ellas Secreto bien guardado (2010), Y ellos se fueron (2011), Lo que no se dice (2012) y La dama de noche (2013), entre otras, todas con gran éxito de público y ventas.
  • Su libro Mujer y maestra obtuvo el Primer Premio de Novela Histórica 2009 del Gobierno de San Luis. En el año 2011 fue premiada por la Legislatura de la Provincia de Córdoba como la artista destacada del año. En el mismo año estuvo nominada al premio Cordobés del Año del diario La Voz del Interior por su actividad literaria, obteniendo el reconocimiento como Cordobesa destacada del año 2011.
  • En el año 2016, fue ganadora del Premio del Lector por su libro Los colores de la felicidad en el marco de la 43° Feria Internacional del Libro de Buenos Aires.
La escritora argentina Viviana Rivero en ciudad de Buenos Aires. Foto Maxi Failla.La escritora argentina Viviana Rivero en ciudad de Buenos Aires. Foto Maxi Failla.

Los soles de Santiago, de Viviana Rivero (Planeta).