Finalmente y después de cinco investigaciones rigurosas y apasionantes que revelan los ecos en el presente de los momentos más oscuros del siglo XX, el jusrista y profesor de Derecho Internacional en el University College de Londres Philippe Sands (Londres, 1960) ha regresado a la ficción. En la presentación de Calle Londres 38. Dos casos de impunidad: Pinochet en Inglaterra y un nazi en la Patagonia (Anagrama) esta noche en el Malba anticipó que trabaja en una novela: “Quiero liberarme de la necesidad de proporcionar evidencia para respaldar cada palabra”, dijo un poco en chiste y un poco en serio.

Sands acaba de llegar de Chile, primer destino en el que presentó su libro porque, consideró, que era de justicia ya que la historia tiene por protagonsta al dictador trasandino. Y precisamente de justicia se trata todo lo que rodea a Sands, que ha intervenido en destacados juicios internacionales celebrados en el Tribunal de Justicia de la Unión Europea, la Corte Internacional de Justicia, la Corte Penal Internacional y el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.

Entre los casos en los que ha participado se encuentran los crímenes de guerra en Yugoslavia, el genocidio de Ruanda, la invasión de Irak, las torturas de la prisión de Guantánamo, las disputas en torno al archipiélago de Chagos y el juicio al dictador Augusto Pinochet. Toda esa materia se expresa en sus libros: Calle Este-Oeste, Ruta de escape, La última colonia además de participar en el volumen colectivo Exploradores, soñadores y ladrones.

Una novela argentina

En rigor, el desembarco en la ficción no es el primero. “La verdad es que será mi segunda novela. He escrito una que nunca he mostrado a nadie y que, de hecho, está ambientada en la Argentina, aquí en Buenos Aires”, reveló para sorpresa general.

Philippe Sands presentó su nuevo libro en el Malba. Foto: Clarín.Philippe Sands presentó su nuevo libro en el Malba. Foto: Clarín.

Sands mencionó que aquella historia refería a los campos de concentración de la dictadura y que “giraba en torno al papel de un oficial naval conocido como el Ángel de la Muerte y llamado Alfredo Astiz. Me fascinó esa historia”, djo y reconoció que el resultado no lo había conformado, de manera que el libro quedó en un cajón durante 15 años. “Sin embargo, creo que quiero intentarlo de nuevo, y sé qué historia quiero contar”, agregó.

Pero antes de eso, el tema fue Pinochet y las revelaciones que este Calle Londres 38 aporta sobre el vínculo entre el general chileno y Walther Rauff, oficial de las SS alemanas que tras abandonar Europa encontró refugio en Punta Arenas, en el sur de Chile.

A raíz del arresto del dictador chileno en Londres en 1998, Sands fue contratado como abogado por Human Rights Watch, y tuvo la oportunidad de participar en ese relevante casos penal. Esa participación lo puso en contacto con algunas de las fuentes de este libro. Aunque esta historia comenzó después.

Mientras se documentaba para un libro, Sands encontró una carta escrita del líder nazi Walther Rauff, creador de las cámaras de gas ambulantes, que perseguido por crímenes contra la humanidad y genocidio, había logrado escapar haca Chile, donde administraba una empresa pesquera. Al abogado británico jamás se le ocurrió que pudiera existir alguna conexión entre Rauff y Pinochet, pero las vidas de ambos habían estado profundamente entrelazadas y Calle Londres 38 es la prueba de eso.

Si bien Rauff se cuidó de que no quedaran documentos con su nombre, Sands documentó con archivos, pero principalmente testimonios y conversaciones, aquel vínculo. Esta noche, en diálogo con el periodista Martín Sivak, contó que el título refiere a una dirección en Santiago de Chile: “Este título refleja en cierto sentido el epicentro del libro. Londres es una calle del centro de Santiago. Una una calle maravillosa, que comienza con una iglesia, la Iglesia de San Francisco, sobre ella hay un espacio que recuerda a la premo Nobel de Literatura Gabriela Mistral y luego hay un edificio que fue la sede del Partido Socialista y que desde principios de 1974 sirvió como el mayor centro de tortura”, describió.

Pero no es por estos enclaves que optó por ese nombre: “Pero es el título del libro porque fue el primer lugar en el que encontré una conexión clara entre Rauff y Pinochet gracias a que un hombre llamado León Gómez me contó que él personalmente fue interrogado y torturado ahí en presencia de Walther Rauff”.

Philippe Sands presentó su nuevo libro en el Malba. Foto: Clarín.Philippe Sands presentó su nuevo libro en el Malba. Foto: Clarín.

Voces que recuerdan

Los testimonios, los recuerdos, la memoria compartida son parte sustancial del libro. Una anciana que recuerda haber cocinado cinco veces para el jerarca nazi y sus invitados. Otra mujer que trabajó en la zona de Punta Arenas y guarda un hermoso recuerdo de aquel hombre. La traductora que acompañó a Pinochet durante el proceso penal en el Reino Unido. Las voces reponen lo que los documentos destruídos tras la disolución de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA) –una suerte de terrible policía secreta de la dictadura de Pinochet– en agosto de 1977.

Sands reconoció el valor de esos testimonios. “Tuve a las dos personas principales que acordaron en nombre de los Gobiernos de Chile y Reino Unido colaborar con el regreso de Pinochet a Chile y nunca habían hablado con nadie pero me dieron todos los detalles. ¿Por qué lo hicieron? Básicamente porque pensaban que después de 25 años había que llamar a las cosas por su nombre”, dijo.

Esa es una de las revelaciones del libro. Pero hay otras. “Llegué a Santiago el jueves pasado y pensé que la mayor revelación fue haber confrmado ese acuerdo entre los gobiernos británico y chleno. Pero en cierto sentido eso no es una revelación porque todo el mundo sabía que algo había pasado, aunque nadie había dado nunca los detalles”, explicó Sands.

Y continuó: “La segunda revelación fue la existencia de documentos relacionados con la Caravana de la Muerte firmados por el propio Pinochet que, al menos en algún momento, estuvieron en posesión de Chile y Reino Unido”.

Pero para Sands, la tercera revelación es la que causó un “mini escándalo”: “Los testimonios de varios implicados dan cuenta de que el Gobierno chileno preparó un dossier de diez páginas a Pinochet para que aprendiera a fingir demencia y un deterioro de salud que le permitiese regresar a su país y evitar la extradición a España”.

En varias ocasiones, el abogado confesó la importacia que las casualidades tienen en su vida. Bromeó con la diferencia de perspectivas con su esposa al respecto: “Natalie me salva de mí mismo. Ella tiene mejor juicio que yo”, la valoró y compartió conexiones sorprendentes entre su familia política y los protagonistas del libro.

Philippe Sands presentó su nuevo libro en el Malba. Foto: Clarín.Philippe Sands presentó su nuevo libro en el Malba. Foto: Clarín.

Por último, Sands revisó un tópico al que vuelve en cada libro: el vínculo entre justicia y literatura. “Soy un abogado y creo en la justicia, pero no creo que las cortes sean el único camino. Otra función del tribunal, aparte de hacer justicia, es contar historias”, aseguró.