El sábado finalmente llegó el día más esperado para Lío Pecoraro, quien hace nueve meses le detectaron leucemia e inició un duro tratamiento. Lío regresó a la conducción de «El Run Run del Espectáculo», Crónica, desde su casa y no pudo evitar quebrarse. “Parecía que Lío podía dejarnos, porque así entramos al Hospital de Clínicas con el riesgo de su muerte. Y Lío hoy está más firme que nunca y dando pelea. Señoras y señores, hoy vuelve Lío Pecoraro”, lo presentó su compañero y amigo, Fernando Piaggio.

“¡Hola, chicos! No paro de llorar, no paro de emocionarme. Estoy muy emocionado. Les voy a decir una cosa. Atravesé una muy fea, me tocó una cosa muy dura a mí y quiero agradecerle a toda la gente que estuvo al lado mío, y a mi decreto que puede parecer redundante”, comentó Lío, que no paraba de llorar.

Y señaló: “Desde el día uno dije que era decretado, ganado y sanado. Pero no es un proceso fácil, estuve muchos días internado en el Hospital de Clínicas. Estoy contento de estar acá, en Crónica. Quiero agradecerle a toda la gente del canal, y no me quiero olvidar de la gente del Hospital de Clínicas, y a la Fundación Favaloro por toda la etapa del trasplante”.

Hace unos meses, Lío Pecoraro se sometió a un intercambio medular con su hermana más chica, Laura, que era compatible y no dudó en ayudarlo con ese invalorable gesto de amor. «Muchas ganas de volver al ruedo. Todo encaminado, de a poco, con fe. Tengo plena convicción de que a veces, querer es poder. Tengan fuerzas, no bajen los brazos. Cada vez falta menos. Gracias a todos los que estuvieron y están presentes en esta travesía que ya va terminando su recorrido con este final feliz», posteaba a pura fuerza hace unas semanas.