Empezar a correr desde cero no es sencillo. El cuerpo se resiste y nos pone todo tipo de trabas mentales y físicas, pero probablemente lo más complejo sea ganar la forma física suficiente para que sintamos que todo progresa y podamos animarnos a seguir haciéndolo. Por eso, como en cualquier otra disciplina deportiva, hay que aprender cómo se hace y ahí nos puede ayudar una aplicación para el teléfono móvil.
Tenemos todo tipo de accesorios que nos ayudan en la práctica deportiva, como relojes, pulseras y otros wearables, y podemos complementarlos con una aplicación que nos haga de entrenador personal. En el caso de convertirse en un runner, ‘Comienza a correr’ puede sernos de gran utilidad, y podemos pagar al creador lo que consideremos justo por ella.
Deja que esta app te enseñe a correr
En mi caso particular, arranqué el mes de julio con la aplicación de Adidas Training para comprobar si tenía la suficiente fuerza de voluntad para seguir programas estrictos, y a final de julio lo decidí: era la hora de correr. Tras evaluar diferentes opciones para mi Android, opté por ‘Comienza a correr’. Estoy usándola desde esta semana y estoy más que contento.
En ‘Comienza a correr’ encontramos programas para que podamos levantarnos del sofá y, pasados cuatro meses, llegar a correr 60 minutos seguidos. Aquí nadie habla de distancia, de ritmo o de velocidad, simplemente nos ayuda a poder correr durante el tiempo elegido y lo logra aumentando ligeramente el tiempo de carrera entre sesiones. Para ello emplea señales visuales en el móvil pero también la voz para ir marcándonos la pauta a través de unos auriculares.
La app ofrece cuatro programas para ir paso a paso y registra nuestra actividad y progreso
El programa se divide en cuatro fases de cuatro semanas de duración cada una, actualmente me encuentro en la primera. Por ahora he pasado de correr 6 minutos en bloques de 1 minuto a correr 8 en la tercera sesión. El programa arranca cada día con 5 minutos caminando para después empezar a ponernos a tono y, si lo deseamos, dispone también de calentamientos previos antes de salir a la calle o subirnos a una cinta. Nosotros elegimos.
Cada bloque de cuatro semanas tiene un objetivo progresivo: 20 minutos, 30 minutos, 40 minutos y 60 minutos
Al acabar cada sesión, la app analiza nuestra ruta en base a las mediciones del GPS, algo que también le ayuda a saber nuestra velocidad máxima andando y en carrera, y nos da las calorías consumidas (siempre una estimación en base a los datos físicos que le damos) y la longitud recorrida. Si lo deseamos, podemos sincronizar la app directamente con Google Fit para que unifique nuestros registros deportivos. En mi caso particular, por ejemplo, he decidido no sincronizar la app con Fit para regirme por las mediciones de mi reloj inteligente y que así no se pisen ambos registros. De nuevo, que cada usuario elija lo que estime más oportuno.
Puedes usar la app sin pagar o desbloquear el resto de funciones por el precio que consideres justo
Además de estos programas guiados para «aprender» a correr, la app dispone de un modo de carrera libre que simplemente usa el GPS para guardar nuestros registros pero que no realiza ningún tipo de tutelaje sobre la carrera. Como dijimos al principio, también elegimos lo que pagamos. Podemos usar la aplicación gratis con algunas funciones bloqueadas o bien optar por pagar, y allí nos encontramos tres tarifas diferentes al gusto de cada usuario. Cada cual paga lo que considera justo, o simplemente elige no pagar.
En mi caso, estoy realizando carreras los lunes, miércoles y viernes mientras que el resto de días entre semana (y el sábado) los estoy dedicando a un programa de pesas a través de otra app del mismo desarrollador. Pero esa aplicación os la contaré otro día. Si estáis buscando una guía a la hora de correr, ‘Comienza a correr’ es muy económica y, por ahora, práctica. Ya os diré si al final del cuarto mes corro lo que dice que voy a correr. Por ahora lo único que os puedo asegurar es que no creí que llegaría a correr 8 minutos, aunque sea por partes, y lo estoy haciendo.
