Es muy, pero que muy complicado pensar en esa catedral del cine de acción que es ‘Jungla de cristal’ —y, por supuesto, en sus secuelas— sin hacerlo directamente en Bruce Willis, en esa chulería casi innata que dio a su eterno John McClane y en ese «Yippee-ki-yay, hijo de puta» reconvertido de one-liner ochentero a icono popular. Pero existe un universo paralelo en el que el héroe del Nakatomi Plaza es muy diferente.

Cuestión de humores

Desde que comenzó a gestarse el largometraje, la lista de nombres que se puso sobre la mesa para dar vida al policía de New Jersey fue tan extensa como espectacular. Harrison Ford, Charles Bronson, Richard Gere, Don Johnson o el mismísimo Sylvester Stallone fueron algunos de los intérpretes que se barajaron; pero hay uno de ellos que estuvo a punto de enfundarse en la camiseta de tirantes de McClane y que rechazó el papel por un motivo de lo más peculiar: Clint Eastwood.

Pero ¿qué impulsó a esta leyenda a decir que no a ‘Jungla de cristal’? Gracias al medio /Film, donde han entrevistado al guionista Jeb Stuart, hemos conocido que el bueno de Clint decidió pasar de largo, simple y llanamente, porque no entendía el sentido del humor del libreto.

«Acudieron primero a Clint Eastwood. Irónicamente, su respuesta a los productores fue ‘No pillo el humor’, lo que, para mí, fue un shock, porque si escuchas muchas de esas palabras… Eastwood es una de las pocas personas que podrían haber interpretado una frase como ‘Ven a la costa, lo pasaremos bien’. Podrías verle haciéndolo. Él fue mi inspiración».

La verdad es que, repasando la filmografía de Eastwood, sobradamente nutrida de personajes con un sentido del humor crudo, cínico y de lo más negruzco, sorprende que esta fuese la razón que le alejó de esta joya de John McTiernan. Pero, a rey muerto, rey puesto; y es que Willis ocupó un puesto en el que parecía no encajar, pero con el que terminó cautivando a propios y extraños.

«Cuando llegó a Willis, yo era un gran fan de ‘Luz de luna’, pero nadie le había elegido como un tío de acción. Así que, en términos de entender al personaje, lo clavaron. Quiero decir, se aseguraron de que el público pudiese comprar el hecho de que no es sólo un tipo simplón de Jersey, y Bruce nos dio eso. Creo que nadie tuvo dudas a partir de entonces».