Julio Bocca, lejos de sentirse intimidado por su presencia o de pretender matarla, llamó al reptilario Alternatus (con sede en Piriápolis) y fue Ignacio Ethandy quien acudió para rescatarla.
Para sacar a la yarará tuvo que romper parte del piso de madera. Este tipo de ofidio es habitual en área suburbana, rocosa o montañosa y puede medir hasta 1,70 metros. Y si bien es venenosa, ataca por miedo.
Ignacio en sus redes expresó: «Tuvimos la oportunidad de conocer a una persona muy reconocida en el mundo artístico, Julio Bocca, y la suerte de descubrir su calidez y amabilidad durante este rescate. Nos dolió tener que cortar algunas partes del deck, pero no dudó en permitirnos, ya que sin ello, habría sido imposible retirarla».
Luego de capturar a la yarará, el responsable de Alternatus Uruguay, y Julio Bocca, posaron juntos para una foto.
JL
