Un suba brusca del tipo de cambio, equivale a una brusca transference de ingresos en beneficio de sector exportador, a costa del resto de los argentinos.

# Martín Guzmán#Nohabradevaluacion #DolarBlue
A 2 meses de haber arreglado con los acreedores privados ( locales y extranjeros) una restructuración de deuda en dólares, que significo un ahorro en moneda  norteamericana  de mas de 40 mil millones para el país, el Gobierno se encuentra enfrascado en una disputa por el valor del tipo de cambio. Los contrincantes  del Gobierno básicamente son 2:  sectores agro exportadores y capitales especulativos . Estos “capitales golondrinas “ quedaron atrapados con bonos en pesos emitidos en 2018, a los que no llegaron a cambiar por dólares billetes al establecer Mauricio Macri un fuerte  “cepo” al dólar ( primero tope para comprar  10 por mes  por mes y luego tope de 200 ).
En  en declaraciones a radio Con Vos, Guzman  ratificó hoy que “no va a haber devaluación”, y aseguró que “va a continuar la depreciación del peso ante el dólar por la inflación, como hasta ahora”, tras admitir, que “tenemos una brecha cambiaria muy elevada”.

La brecha cambiaria, señaló el Ministro, “genera una expectativa de devaluación que no se condice con la circunstancia que enfrentamos en el frente externo”( superávit  en la balanza comercial de mas  US$17000 millones  y sin desembolsos por pagos al exterior de deuda publica).
Guzmán indicó luego que los mercados no oficiales “son muy pequeños y no tienen de forma directa una relevancia macroeconómica: el contado con liquidación (CCL) opera volúmenes de US$ 30 millones por día y con pocas operaciones el precio se dispara, amplia la brecha y genera mucha ansiedad”.

“Las expectativas de devaluación indirectamente afectan a la economía, por supuesto. Y por eso la brecha nos ocupa, apuntamos a estabilizarla y después bajarla”, afirmó.

Un “goteo” hacia arriba
En los cuatro años anteriores, recordó Guzmán, “hubo un proceso de entrada de capitales especulativos, que buscaban retornos altos de corto plazo, en Lebacs, y empezaron a salir en 2018 y 2019”. Pero una parte quedó atrapada por los controles de capitales y buscan salir, y eso ha ido goteando por este mercado. Si piensan que no van a poder salir empiezan a apurar la salida, y a eso se suman actores locales”, continuó.
Como instrumento para eliminar la presión sobre los dólares  finacieross ( son legales) el oficialismo   subastara  bonos en dólares  que se podrá comprar  con bonos en pesos, “un mecanismo de mercado al mejor postor para limpiar parte de las presiones que generan una elevación de la brecha”. En el gabinete económico entienden que los capitales especulativos que quedaron atrapado en 2019, podrían aprovechar estos nuevos bonos y canjear sus pesos por estos instrumentos en dólares, y así se derrumbarían  las cotizaciones del Contado con Liqui y el Dolar MEP.

Osvaldo Jesus Gadban