Suelen causar dolor, enrojecimiento e inflamación, y se producen, en ocasiones, por una mala elección de nuestro calzado

Si lo has padecido sabes perfectamente que se trata de un problema muy molesto que afecta a la salud de tus pies. “Una uña encarnada es una alteración que se produce en los dedos de los pies, una dolencia que se presenta cuando el borde de la uña se adentra en la piel del dedo del pie. En la mayoría de los casos presenta dolor, enrojecimiento e inflamación alrededor de la uña, incluso infección de partes blandas”, nos cuenta Maite García, podóloga y vicepresidenta del Ilustre Colegio Oficial de Podólogos de la Comunidad Valenciana (ICOPCV).

¿Por qué se produce la encarnación de la uña?

La experta nos detalla que  “hay diferentes circunstancias que causan la dolencia pero los zapatos que no ajustan bien o la utilización de un calzado demasiado apretado y unas uñas del pie no cortadas adecuadamente son las causas más comunes”. Además, matiza que el dedo gordo es generalmente el más afectado pero cualquier uña del pie puede resultar encarnada.  Por eso, debemos acudir al podólogo desde el primer momento, puesto que evitaríamos complicaciones, podríamos evitar que nos vuelva a ocurrir averiguando el origen y seguir sus consejos para el tratamiento en casa.

¿Existen grados de encarnación de la uña?

La especialista confirma que existen tres grados de encarnación:

-Estadio 1: consiste en un pequeño enrojecimiento de la piel con ligero dolor.

-Estadio 2: la uña está visiblemente clavada dentro de la piel, alrededor observamos inflamación y una vesícula con pus y además el paciente refiere dolor.

-Estadio 3: alrededor de la uña encarnada podemos ver deformidad del dedo, con un tejido granuloso enrojecido con gran inflamación, son casos en los que hay que recurrir a la cirugía.

¿Cómo se trata este problema?

La podóloga del ICOPCV nos detalla que, ante un problema de una uña encarnada en un pie, existe el tratamiento conservador, que consiste en eliminar la parte de la uña encarnada, mediante la técnica de espiculectomía, lo único que vuelve a encarnarse cuando la uña crece. “También existe un tratamiento conservador e indoloro llamado ortonixia, este tratamiento consiste en la modificación de la curvatura de la uña mediante un tutor que va pegado a la lámina, pero no estaría indicado para todos los tipos de uñas o estadios”, nos explica. Y añade que la dolencia de uñas encarnadas se puede operar y eliminarla para siempre y que dejen de molestarte. “Aun así, también el podólogo puede practicar esta sencilla cirugía en la que se utiliza una pequeña cantidad de anestesia en la zona. La intervención consiste en un pequeño corte en la uña que está provocando el dolor eliminando la matriz de la uña para evitar su crecimiento en la zona problemática. La infección provocada por una uña encarnada en pacientes con diabetes podrían acarrear complicaciones graves”, concluye.